Han pasado más de cuatro años, reviso mi último escrito en el año 2018 con la satisfacción que lo que escribí desde mi perspectiva de años atrás, puedo decir que muchas de las cosas de las que dije hoy mis hermanos panameños y panameñas están consientes que era verdad sobre todo de los desafíos que enfrentan los niños y las niñas.
Espero que entiendas que no existen niños y niñas con necesidades «Existen niños y niñas con derechos vulnerados», la pobreza y las desigualdades producidas por el triangulo de las violencias, las violencias visibles y las invisibles. Mi objetivo desde hace años ha sido sensibilizar y orientar, con la gracia Divina puedo decir que hoy nuestra voz es más escuchada, pero creo que muchos no saben los desafíos y las lágrimas que me han costado poder demostrar hoy con pruebas que lejos de tu estatus social o económico podemos dar nuestros aporte a favor de la niñez y una cultura de paz, pero antes debemos armarnos de sacrificios, analizar, estudiar e investigar… con responsabilidad y constancia.
A partir de hoy te invito a que me leas semanalmente, inicio mediante esa plataforma cada experiencia que me enseñó a que la perseverancia es el máximo impulso cuando de la niñez en riesgo se trata ¿Por qué la perseverancia? Porque esta te llevará hasta el final y la voluntad te mantendrá firme a pesar de los retos que encuentres en el camino.
#CAMINANDOPORLAINFANCIA
He caminado lo suficiente y he vivido con mis niños y niñas las tristezas y las alegrías, he visto en sus rostros esa confianza de que «saben que se les va ayudar», no he sentido un miedo tan profundo como el temor de no poder en el camino cumplir la promesa de que estará seguro y que Nadie le va a lastimar, pero justo esto es lo que me ha llevado a enfrentarme a Autoridades y Quienes tienen el poder de cambiar las cosas, porque detrás de cada frase o reclamo que hago en busca de la justicia social, existe una historia de un niño que me enseñó a no claudicar.
Si has leído hasta aquí, gracias, porque eso me demuestra que te interesa ver más allá de lo que muchos entiende como «ayudar a la niñez» como siempre digo, no es llegar un día y llevar regalos y nunca más volver es algo más profundo y comprometido, sobre todo urgente y necesario.
Lucy Cordoba
Activista de Derechos Humanos a favor de la Infancia
Escribo con el alma 